Le doy a esta mentira apariencia de verdad y se convierte con el tiempo, en razón de cartapacio; pues la llevo ya estudiada sin venir al caso.
Si se presenta una duda vuelvo al lugar donde nació, le concedo lo que dice y más de alguna vez, me encontró fuera de razón, tan excesiva como lo estoy hoy.
Me esfuerzo en conseguir agua de ángeles, esa perfumada con diversas flores, mientras intento ser cuidada por alguien más.
Juro que no soy obsesiva, pues la perturbación anímica que cargo no es producida por una sola idea fija…más bien dos o tres.
Me encuentro varada en esta ribera de soledad a causa del ahínco de tenerte, de quererte, más asumo con responsabilidad mi gotita de ingenuidad.
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario